domingo, 22 de septiembre de 2013

Autobronceador: mejor en Septiembre

Llevo años siendo fan de los autobronceadores. Me faltan pocos por probar y me encanta comprobar que en los últimos años la calidad ha aumentado de forma considerable. Ya no admitimos quedarnos con manchas o churretes en la piel y somos mucho más exigentes así que parece que las marcas se están poniendo las pilas.

Para mi la mejor época para utilizar autobronceadores es precisamente esta. La piel tiene algo de color, por mucho que os hayáis protegido del sol y es más fácil aplicarlos sin que se noten pequeños fallos (Cuando la piel es blanca impoluta es mucho más fácil ver donde se ha aplicado más producto, por ejemplo.)
Mis consejos:
1.- Todos los “manuales” de autobronceador, revistas y blogs de belleza recomiendan exfoliar la piel antes.
Yo no lo suelo hacer, aunque sí procuro que la piel esté limpia y sin restos de otros productos.
2.- Yo prefiero hacerlo por la noche. ¿El motivo? Por mucho que hayan mejorado las fórmulas, a mi el olor de cualquier autobronceador (que realmente es el olor de la oxidación en la piel)no me termina de gustar y además, por la noche la piel se renueva y por la mañana después de la ducha habremos eliminado la parte “sobrante” de producto.
3.- Yo prefiero hasta la fecha las toallitas pero los consejos valen con cualquier autobronceador.
Comienzo aplicándolo en la cara y extendiendo muy bien por el cuello, detrás de las orejas, escote y  hombros.
Después espero más o menos un minuto (mientras me voy lavando las manos para evitar que se coloreen) y a continuación con un pañuelo de papel o toalla, hago como si quitara (suavemente sin frotar demasiado) el producto de las aletas de la nariz, de cualquier granito o cicatriz (porque ahí se acumula producto y aparecen manchas) y del cuello.
Realmente no estás quitando pero eliminas excesos.
4.- Después aplico por el cuerpo y hago lo mismo. Descanso un minuto y quito excesos de  pliegues, codos, rodillas, etc…
5.- Importante: lavar as manos bien y secar fuertemente entre los dedos y en la muñecapor la parte de dentro (ahí siempre se quedan manchas)
6.- Por  la mañana te duchas normalmente y aunque te parezca que no te ha subido mucho, no apliques más hasta el tercer día para evitar sorpresas.
Al tercer día puedes aplicar más, siguiendo el mismo procedimiento.
Estos son los consejos que yo misma sigo desde hace muchos años, pero siempre leer los prospectos por si acaso hay alguna indicación especial.
¿Qué os parecen? ¿Tenéis algún otro consejo?

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